En el acto estuvieron el vicepresidente primero del Cabildo y consejero de Bienestar Social, Aurelio Abreu; la consejera delegada del IASS, Margarita Pena, así como la directora gerente de AFES, Alcia Silva. También estuvieron la psicóloga Sara Fuentefría y la paciente de Salud Mental, Graciela San Miguel.
El vicepresidente primero, Aurelio Abreu, señaló que “día a día, aprendemos de las personas que padecen algún trastorno mental” y la consejera delegada del IASS, Margarita Pena, insistió en la necesidad de rompera barreras, al tiempo que destacó “la importancia de los programas de inserción laboral, fundamental para la buena evolución de la enfermedad”.La psicóloga Sara Fuentefría explicó que solo el 3% de las personas con trastornos psicóticos cometen actos violentos y eso ocurre cuando no se medican. Entre el 35 y el 50% de las personas enfermas no recibe un tratamiento adecuado.
La nota emotiva la puso Graciela, paciente de Salud Mental, que contó su experiencia personal y explicó que con una terapia y tratamiento adecuados ha mejorado su calidad de vida y es capaz de aprender, trabajar y salir adelante. Graciela invitó a la población a no discriminarles. “Nuestro trbajo funciona de otra manera pero con medicación podemos vivir en sociedad”, añadió.La gerente de AFES, Alicia Silva, recordó que la asociación trabaja para mejorar la calidad de vida de estas personas y ofreció un dato: “solo el 5% de estas personas aceden a un puesto de trabajo”.
ObjetivosUna de las líneas estratégicas en la que trabaja AFES para lograr su misión es la reducción del estigma existente en lo relativo a la salud mental, a través de campañas de sensibilización como la de hoy, llamando la atención sobre la discriminación que viven las personas diagnosticadas con una enfermedad mental en los aspectos sanitario, social y laboral.
Con el desarrollo de esta campaña se persiguen diversos objetivos, tales como aumentar el conocimiento social, informando con exactitud de conceptos y términos relacionados con la salud mental; facilitar información normalizadora, dando a la enfermedad mental el mismo trato que a cualquier otra; desmontar falsas creencias, mitos o prejuicios; no estigmatizar a las personas con enfermedad mental con usos incorrectos de las palabras que las definen, cuidando el lenguaje y no etiquetando.Datos.(fuente: Guía de estilo y medios de comunicación, www.feafes.com):
* Entre el 2,5 y el 3 por ciento de la población adulta tiene una enfermedad mental grave. Esto supone más de un millón de personas.* El 9 por ciento de la población padece algún tipo de trastorno mental (grave o leve) y el 15 por ciento lo tendrá a lo largo de su vida.
* Se calcula que la esquizofrenia afecta a cerca del 0,7 por ciento de la población española y el trastorno bipolar al 0,5 por ciento.* Más de la mitad de las personas con enfermedad mental que necesitan tratamiento no lo reciben, y un porcentaje significativo no recibe el adecuado.
* Las familias asumen la mayor parte de los cuidados de las personas con enfermedad mental. El 88 por ciento de la atención de los servicios de atención los realizan cuidadores informales.* El 10 por ciento de las personas con discapacidad lo son por causa de una enfermedad mental.
* El empleo es uno de los principales ámbitos de estigmatización: sólo el 5 por ciento de las personas con enfermedad mental tiene un empleo regular, y el 44 por ciento aseguran haber sufrido algún tipo de discriminación laboral.¿Qué es Afes?
Afes es una entidad sin ánimo de lucro, declarada de utilidad pública, cuyo ámbito de actuación es la Comunidad Autónoma de Canarias. Su finalidad es la mejora de la calidad de vida de las personas con enfermedad mental y sus familiares a través de acciones de defensa de sus derechos, de la promoción de programas orientados a la mejora de la salud mental y la prestación de diversos servicios que fomenten su autonomía y normalización.Este año, en diciembre, se cumple el 30 aniversario de Afes. Su fundadora, Soledad García (1915, 2005), trabajadora social en el Hospital Psiquiátrico de Santa Cruz de Tenerife durante 25 años, tuvo ocasión de constatar de primera mano que la situación en la que se hallaban las personas con trastorno mental grave distaba mucho de ser digna. No se ponían todos los medios necesarios para su rehabilitación; no se perseguía una integración social plena; y no se prestaba apoyo a los familiares, que a causa de su desconocimiento e incomprensión, carecían de recursos para enfrentarse a la gravedad de la situación.
Toda esa experiencia personal, profesional y académica la llevó a considerar imprescindible la creación de la asociación, una entidad que permitiera a las personas con problemas de salud mental dotarse de los medios necesarios para su rehabilitación e inserción. Así, en 1982, poco antes de su jubilación, fundó Afes, iniciando sus actividades en un pequeño local cedido por el párroco del barrio de Cruz del Señor, en Santa Cruz de Tenerife.Desde sus inicios, hasta ahora, se ha avanzado mucho, y actualmente tiene en marcha más de 35 programas, dando alternativas aproximadamente a más de 800 personas a lo largo de cada año, a través de más de 70 personas entre profesionales y voluntarios.
El próximo domingo 10 de octubre millones de personas en todo el mundo conmemoramos el Día Mundial de la Salud Mental. Bajo el lema “La mejor inversión: tu salud mental”, este año se celebrarán diferentes actos conmemorativosMás datos.
Cabe destacar que el 82 por ciento de la población general cree que debería hacerse algo para mejorar la aceptación pública de las personas con enfermedad mental. Sin embargo, solo el 8 por ciento mostraría apoyo a que en su barrio vivieran personas con enfermedad mental. (Gaebel et al., 2002)El 40 por ciento de la población general cree que las personas con enfermedad mental son potencialmente peligrosas (Thompson et al., 2002). Menos del 3 por ciento de las personas diagnosticadas con esquizofrenia y otras psicosis comenten actos de violencia, cuando no reciben el tratamiento adecuado.
El principal ámbito de discriminación para las personas con enfermedad mental es el laboral;de ahí que sólo el 5 por ciento de las personas con enfermedad mental tiene un empleo regular (Referencia: Comunidad de Madrid y Obra Social de Caja Madrid. Estigma social y enfermedad mental. 2006. www.1decada4.es).El 18 por ciento de la población general cree que las personas con enfermedad mental suponen un riesgo si no se las hospitaliza. El 99 por ciento de los y las profesionales no lo cree (Referencia: Comunidad de Madrid y Obra Social de Caja Madrid. Estigma social y enfermedad mental. 2006. www.1decada4.es).
De igual modo, los resultados de las investigaciones realizadas por el equipo español de “La esquizofrenia abre las puertas” mostró que, aunque la mayoría de las personas con enfermedad mental opinaba que su enfermedad era curable, el 78 por ciento de los familiares de personas con esquizofrenia opinaba lo contrario. El 69 por ciento de las familias consideraba que no podían estudiar, un 45 porciento opinaba que las personas con esquizofrenia no se pueden casar, un 52 por ciento que no podían tener hijos y un 29 por ciento opinaba que no podían tener novio o novia.